jueves, 1 de agosto de 2013

24 Non Stop

Cuando llegan los veinticuatro no puedes dejar de pensar en que te haces viejo, en que te va quedando menos de esa juventud que creías nunca acabaría (por suerte o por desgracia).


Durante estos primeros siete meses he tenido la oportunidad de pensar en todo lo que he conseguido en mi vida y todo lo que quiero conseguir en un futuro, sin dejar de pensar en que los hechos se consiguen con trabajo día a día y no se hacen en diez minutos como los Fideos Chinos de Pollo de Maggi.

Tiene cosas buenas y malas esto de hacerse mayor, aunque no voy a mentar y pensar las malas, ¿pa' qué wani?. Ponerte piedras tú mismo en el camino no sirve de nada, solo para frenarte y hacerte creer que eres incapaz de hacer cosas que realmente puedes conseguir.

No me quiero enrollar demasiado contando reflexiones de un sireno pasteloso (como el nombre del propio blog indica), además de no tener poca inspiración que haga de estas líneas algo interesante y con sentido.

Espero que pasen muchos cumpleaños más, que todos los veáis y que yo los viva en todas mis carnes.

Showarmita rico de pollo :P