sábado, 6 de marzo de 2010

Revelaciones reveladas

Es tan facil huir, es tan fácil dejar de enfentarse a los miedos y errores que todos cometemos. Esas fuerzas que son tan necesarias día a día, no hacen acto de presencia en las vidas de todas las personas que por una razón u otra son incapaces de enfrentarse a esa incertidumbre, a ese dolor, a cualquier contratiempo en general y que solo pueden huir y refugiarse en sus propias almas, en su soledad, en una esquina de su habitación.
Muchos tratan de disimularlo ante todas las personas de su entorno, intentando no dejar a la luz esos sentimientos verdaderos que por dentro les corroen, solo por pensar que eso podrá incomodarles de manera alguna.
Todos tenemos problemas, más grandes o más pequeños, y cada uno de nosotros los vivimos y los enfrentamos de distinta manera. Todos y cada uno de nosotros somos especiales y diferentes a los demás, y eso es lo que distingue nuestra manera de encarar las situaciones de la vida. Muchos gozan de esa facilidad para atacar y cortar de raiz cualquier peligro sustancial en su ritmo cotidiano de vida, otros por el contrario, son incapaces de decir ni una sola palabra, de imponer su propia mentalidad, sus ideas, sueños y metas ante esos obstáculos que se les presentan.
Aunque me cueste reconocerlo, me siento muy identificado con esto último que escribo. Me gustaría cambiar esas cosas de mi que no me dejan respirar a veces, que me impiden enfrentarme a ciertas circunstancias de la vida, las que me dejan en la estacada, las que me impiden avanzar psicológicamente.
Siempre agradeceré a esas personas que se preocupan por mí y por todo lo que me acontece. Es un gran privilegio poder contar con personas de ese calibre.
Por último, y aunque venga de mí, si gozais de esa confianza y respeto de parte de vuestras amistades, no dudeis en contarles todas vuestras inquietudes y preocupaciones porque se que estarán ahi para ayudaros y apoyaros en todo.



Pronto más!!!
QOMF